Me encanta la propuesta del libro: "para los que no quieren relegar su hobby a un rincón de la agenda". A los que tienen una deuda pendiente con la plenitud. ¿Sentís que este camino de autoconocimiento y crisis es cada vez más frecuente?
Ví y veo mucha gente atravesando este tipo de crisis. Creo que bastante tiene que ver con el modelo de "éxito" (dinero, poder, prestigio) con el cual somos bombardeados permanentemente y, otro tanto, con la ausencia de tiempo/espacio para mirarse hacia adentro, pensarse y conocerse. El libro parte de mi propio proceso de alienación, perdido en perseguir prestigio y dinero, desoyendo mi propia voz y deseos.
"Uno se pierde al estar más pendiente de la voz social que del propio deseo"
Decís que el libro es para los "que se sienten atrapados, atorados, asfixiados, impotentes en "jaulas de oro". Arriesgaría que esa apelación empatiza con lo que siente mucha gente. ¿Se puede salir de allí?
En mi experiencia, se puede. Al menos, siempre se puede vivir una vida más auténtica. Ahora, mentiría si dijera alegremente que es fácil y que con sólo visualizarlo allí estaremos. Vivir una vida auténtica significa decir muchos "no" a gente que nos quiere o nos importa, a la posibilidad de ser reconocido o a tener una mejor vida material. Como todo en la vida, es una elección que tiene sus costos. Si me preguntas, cualquier costo es barato con tal de vivir alineado con quien uno es y con lo que quiere.
"El que no se escucha a sí mismo, no puede más que obedecer"
Sos coach ontológico. ¿Qué significa? Decís que combinás conocimientos con experiencias personales...
El coaching es una disciplina que intenta justamente ayudar a personas y/o equipos a que puedan tener vidas más auténticas, plenas y productivas. Es básicamente un proceso de aprendizaje transformacional, donde uno cambia la visión del mundo, los juicios que tenemos sobre nosotros, el mundo y los demás, abriendo nuevas posibilidades y empoderándonos para vivir mejor y ser más feliz.
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Tuve la suerte de tener grandes maestros en la formación como Coach. Para empezar, al filósofo Rafael Echeverría (una de los fundadores del Coaching Ontológico), Alicia Pizarro -gran maestra de coaches- y, finalmente, a MI maestra, Nora Tassistro, a quien no sólo le debo mucho de lo que aprendí sino, también, haberme ayudado a transformarme y abrir las puertitas de mi deseo.
"El libro parte de mi propio proceso de alienación, perdido en perseguir prestigio y dinero, desoyendo mi propia voz y deseos"
Cuando me refiero a experiencias personales, es porque todos los ejercicios y sugerencias que incluyo en el libro fueron probadas por mí. Hablo de cosas que efectivamente experimenté.
¿Por qué el nombre "Lunes felices"?
Porque en una época de mi vida de mucho éxito profesional y mucha tristeza personal, los lunes a la mañana me embargaba una nube negra que casi no me permitía levantarme de la cama. Con "Lunes Felices" represento esta idea de salir a la semana laboral con ganas, energía y entusiasmo.
Plata, prestigio y poder: cada vez es más claro que las "tres P" no generan felicidad
La palabra "auténtica" también es de alto voltaje semántico. Tiene que ver con la búsqueda de cierta honestidad con los deseos personales. ¿Se viene una generación más desapegada a los mandatos?
Sí, tiene que ver con vivir una vida en consonancia con nuestros valores personalísimos, con aquello que nos gusta y da sentido, siendo leal a uno mismo.
También observo que las nuevas generaciones vienen con menos mandatos. Ojalá así sea. De cualquier manera, los mandatos no sólo son los "sociales" sino que, muchas veces, las voces de maestros de primaria, abuelos, padres, compañeros de escuela, etc., pueden generarnos pequeños mandatos que nos seteen para perseguir objetivos que no son esencialmente nuestros, o correr carreras de comparación con otros que sólo nos restan energía para vivir la vida como la queremos vivir.
¿Qué relación encuentras entre la propuesta del libro y las artes marciales?
Hay varios elementos de las artes marciales que atraviesan el libro. Está el tema del honor, que para mí tiene mucho que ver con poder sentir cada noche cuando nos acostamos que fuimos fiel con nuestros principios, que lo que pensamos se refleja en lo que decimos y hacemos; y que fuimos respetuosos con los demás.
También está el tema de la figura del "guerrero". No como ente de agresión a otros, sino que como alguien que lucha contra sus demonios y sombras para ser cada vez mejor persona y más honorable.
Por último, está la idea de estar en eje, actuar desde tu centro (hara le dicen los japoneses), que se relaciona íntimamente con lo que comentaba antes.
Por suerte, mi cuerpo fue más sabio que mi mente, y así algo empezó a cambiar
Hablas de 7 pasos. ¿En qué consisten? ¿Suponen un proceso o uno realmente debería graduar y planificar el cambio?
Los 7 pasos contemplan:
1) Descubrir qué nos gusta y nos da sentido: Muchos de nosotros no logramos registrar con claridad qué es aquello que nos gusta, disfrutamos, nos realiza o nos da sentido. Esto requiere un proceso de búsqueda interna honesto y profundo. En el libro propongo ejercicios y técnicas para hacerlo.
2) Desarrollar un centro fuerte: Una vez que descubrimos qué nos gusta y nos da sentido, es importante reforzar nuestro centro de proyección interna, aprendiendo a ser leales con nuestros valores y principios personales. A vivir una vida propia y auténtica. A re-encontrarnos con nuestro "poder para", nuestro guerrero interior, dejar de compararnos con otros, aprender a ser más humilde y generoso, a dar lo mejor que tenemos (no necesariamente ser el mejor) y, principalmente, a animarnos a ser protagonistas y no víctimas o espectadores pasivos de nuestras vidas.
3) Manejar nuestro zoológico de emociones: Con pasos y técnicas para controlar emociones que no nos ayudan como la ira, la envidia, la resignación y el miedo. A conectarnos con la idea de perdón y el poder reírse de uno mismo.
4) Aprender a disponer de más energía física, mental y emocional, a través de técnicas, recomendaciones y ejercicios.
5) A definir las prioridades más importantes de nuestra vida, nuestra semana y nuestro día. A evitar el multitasking y la trampa de lo urgente.
6) Tener una vida más simple y frugal: con menos bienes, relaciones y así andar más liviano.
7) Cómo convertir los pasos 2) y 6) en hábitos diarios.
Terminas refiriéndote a una vida más simple y frugal. Y al comienzo les deseas a tus hijos placer y goce, algo que, según confiesas, te cuesta. Pareciera que esta sociedad que vocifera "pasarla bien" atraviesa mucha frustración. ¿Nos cuesta disfrutar? ¿Qué aconsejas en esa dirección?
Creo que en el fondo aún persiste una visión "eficientista" donde todo tiene que tener una razón, un fin, un objetivo, y sobre el cual se evalúa constantemente el uso de los recursos para lograrlo. Lo entiendo en una corporación, pero no considero que sea aplicable 100% a la vida de la gente. Dentro de esta visión, muchas veces las propuestas de "disfrutar" están ligadas a "consumí", que no está mal pero no puede ser la única respuesta.
Más que frustración, aún cuando creo que somos una generación con poca tolerancia a la frustración, el mal de esta época es la angustia existencial. Es no poder dar una respuesta subjetiva y propia a la preguntas de "¿quién soy? ¿qué quiero hacer de mi vida?".
En mi caso particular, sí, me cuesta entregarme al disfrute así que en este aspecto no puedo dar muchas recomendaciones, ya que ¡recién estoy comenzando a transitar este camino! Igual, quiero aclarar que el camino a la felicidad se arma desde el disfrute hedonista, pero también fundamentalmente desde la búsqueda de sentido y realización personal. En estos dos últimos aspectos vengo más avanzado.
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