Prevenir y reconocer algunas señales cambia radicalmente el pronóstico de muchas enfermedades. Solemos relacionar el paro cardíaco con algo súbito, que no genera síntomas hasta el momento en que, fatalmente, se produce. Sin embargo, no siempre es así. El cuerpo puede avisar durante las semanas previas de que algo no marcha bien y lo hace de muchas maneras, según revelan investigadores del Instituto del Corazón del Cedars-Sinai, en Los Ángeles, Estados Unidos.
Síntomas previos a un infarto
Según los resultados de su estudio, algunos de los signos que aparecen hasta un mes antes son evidentes: dolor en el pecho o abdominal, dificultad para respirar, palpitaciones, disminución repentina de la presión arterial y pérdida de conciencia.
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Otros síntomas más generales, como el dolor de espalda o las náuseas y vómitos, pueden responder a un problema cardíaco o de otra índole, pero en cualquier caso deberían ser dignos de ser valorados por un médico. Y el problema, según los investigadores, es justamente ese: que las señales se ignoran y no son analizadas debidamente por un profesional.
Las consecuencias en estos signos inadvertidos son preocupantes porque la mortalidad se dispara. Casi un tercio de las personas que sufren un infarto mueren antes de llegar al hospital y no llegan a ser atendidos por profesionales de la salud
La singularidad del estudio reside en que la relación de síntomas se obtuvo después de preguntar no solo a enfermos sino también a personas de su entorno, que tampoco dieron importancia a esas señales. Por lo tanto, según los especialistas del Instituto del Corazón del Cedars-Sinai, estos datos deben conducir a estrategias de prevención que impliquen tanto al ámbito familiar como al laboral.
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Otro dato importante a tener en cuenta es que hombres y mujeres sienten diferente el dolor cardíaco.
6 señales de un infarto que el cuerpo da un par de semanas antes
1. Presión en el pecho: No se debe ignorar la presión o el dolor agudo en el pecho. El dolor frecuente de pecho es una señal de infarto, si éste se esparce a brazos, hombros y cuello, es una razón para llamar inmediatamente a una ambulancia.
2. Falta de aliento: El corazón y los pulmones trabajan en conjunto. El estrechamiento de las arterias bloquea el flujo sanguíneo normal, provocando que los pulmones no obtengan suficiente sangre y literalmente la persona se empieza a sofocar.
3. Fatiga idiopática: Si la persona se despierta cansada y siente la falta de fuerzas para realizar sus tareas diarias normales, puede ser una señal de que se acerca un infarto. El cansancio en exceso indica que el corazón trabaja más para bombear sangre.
4. Síntomas de gripe o resfriado: Podría sonar extraño pero la mayoría de pacientes que sobrevivieron a un infarto afirman que sintieron los síntomas de una gripe o un resfriado antes de enfrentarse a un infarto.
5. Sudoración fría: El sudor frío y húmedo es un síntoma bien conocido de un infarto. Significa que el corazón no obtiene suficiente sangre oxigenada. El cerebro comienza a sufrir de falta de oxígeno y tiene falla de circulación sanguínea, por lo que el individuo se confunde y suda frío.
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6. Cambios de humor: Una sensación de miedo sin sentido puede ser una señal de falta de oxígeno. Si el humor cambia abruptamente de estar calmado a feliz a ansioso sin ninguna razón, puede ser que el organismo esté advirtiendo sobre un inminente infarto.
Por supuesto, uno sólo de estos síntomas no quiere decir que la persona tendrá un infarto. El organismo da señales de advertencia y pide ayuda. Es importante tener en cuenta que todos estos síntomas son llamadas de atención que debemos atender. Escuchar al cuerpo es la mejor manera de recuperar el equilibrio y mantenerse sano.
Señales o síntomas de un ictus: trombosis o infarto cerebral
- Debilidad o falta de sensibilidad súbita de la cara brazo o pierna en un lado del cuerpo.
- Pérdida o debilidad repentina de la visión, especialmente en un ojo.
- Pérdida el habla o problemas al hablar o entender
- Fuertes dolores de cabeza de forma súbita sin causa aparente.
- Vértigos, pérdida de equilibrio o caidas repentinas inexplicables, junto con cualquiera de los síntomas mencionados.
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