Portugal ha aprobado el primer caso de su historia de gestación subrogada, con el llamativo hecho de que una mujer de 50 años aceptó gestar a su propio nieto para que su hija pueda formar una familia.
El Consejo Portugués para el Parto Asistido aprobó por unanimidad la solicitud de una mujer de 30 años que no puede tener hijos después de un procedimiento quirúrgico por causa de una endometriosis severa. Antes de esta intervención quirúrgica, se extrajeron sus ovocitos, que fueron congelados.
"A pesar de varios otros casos presentados, sólo éste fue examinado por el consejo y aprobado por unanimidad", dijo un comunicado.
El consejo médico nacional de Portugal ahora lo revisará y tiene 60 días para tomar una decisión. Se espera ampliamente que le dé el visto bueno para seguir adelante.
La subrogación gestacional se legalizó en Portugal en 2016 y se limitó a casos en los que una mujer no puede tener un hijo por razones médicas, especialmente debido a un útero disfuncional o ausente.
La ley estipula que la maternidad de sustitución debe ser altruista - la mujer que acepta llevar y dar a luz a un niño no debe ser pagada por sus servicios.
El texto de la mencionada ley también dispone la obligatoriedad de un contrato escrito entre las partes implicadas en el que se precisen las disposiciones a tomar en caso de malformación del feto o de una interrupción voluntaria del embarazo.