Los frutos del bosque o frutos rojos son un verdadero regalo de la naturaleza. Y no solo por su sabor, en general intenso y delicioso, sino por sus propiedades nutritivas, que los convierten en grandes aliados de la salud cardiovascular y la prevención de envejecimiento prematuro.
Estas pequeñas frutas, en general vistosas, son un alimento que aporta muchos beneficios. Según expertos de Harvard, e encuentran entre las principales fuentes de vitaminas, minerales y nutrientes que combaten enfermedades, y pueden ayudar a reducir el riesgo de muchas afecciones relacionadas con la edad.
Qué son los frutos del bosque
Las estrellas de este grupo de pequeñas frutas que integran el selecto grupo de los llamados “frutos del bosque” son el arándano, la frambuesa, las moras, la frutilla, la cereza, las guindas.
Los berries, como se los conoce en inglés, tienen muy merecida su buena prensa. Te contamos por qué.
Beneficios de los frutos del bosque
Las frutas rojas o frutos del bosque se caracterizan precisamente por la presencia del color rojo en su piel o en su interior. Esta variedad cromática está asociada justamente a los nutrientes que las distinguen, que son los flavonoides, los antocianos y otros compuestos antioxidantes que son muy recomendables para cuidar el corazón.
De hecho, la presencia de estas frutas en la dieta hace que llegue a nuestro organismo una cascada de sustancias que contribuyen a cuidar la salud del organismo. Algunos beneficios:
Los frutos del bosque son antioxidantes
Un estudio mostró que los arándanos, las moras y las frambuesas tienen la actividad antioxidante más alta de las frutas de consumo común, después de las granadas.
Los frutos rojos generan saciedad y son buenos en el marco de una dieta
Los frutos del boosque contienen fibra, que puede aumentar la sensación de saciedad, así como reducir el apetito y la cantidad de calorías que su cuerpo absorbe de las comidas mixtas. Por eso son excelentes en planes de alimentación orientados a perder peso.
Son frutas bajas en calorías y extremadamente nutritivas. Además de tener un alto contenido de antioxidantes, también contienen varias vitaminas y minerales.
Son depurativos y coadyuvantes en dietas
Los frutos rojos están compuestos en su gran mayoría por agua, por esta razón son ligeros y muy recomendables en situaciones de sobrepeso. Su fibra ayuda a movilizar el intestino, y alivia el estreñimiento, por lo que actúan como un excelente depurativo para el organismo.
Ayudan a prevenir infecciones
Son muy ricos en vitamina C. Sin ir más lejos, una fresa te aporta mucha más cantidad de esta vitamina que una naranja, y con una porción de arándanos cubrirías tus necesidades diarias. También las frambuesas son ideales para prevenir infecciones respiratorias y de las vías altas, como anginas, gripe, resfriados, sinusitis, bronquitis….
Además, los frutos del bosque combaten la anemia, pues la vitamina C ayuda a absorber el hierro.
Los frutos del bosque pueden ayudar a reducir la inflamación y disminuir el riesgo de enfermedades cardíacas y otros problemas de salud.
Ayudan a mejorar el azúcar en la sangre y la respuesta de la insulina
Las bayas y otros frutos rojos pueden mejorar los niveles de azúcar en la sangre y de insulina. Los estudios de probeta y en humanos sugieren que pueden proteger sus células de los niveles altos de azúcar en la sangre, ayudar a aumentar la sensibilidad a la insulina y reducir el azúcar en la sangre y la respuesta de la insulina a las comidas ricas en carbohidratos.
Frutos del bosque: contraindicaciones
Las únicas personas que deben evitar los frutos rojos o los frutos del bosque son aquellas que requieren una dieta baja en fibra para ciertos trastornos digestivos, así como las personas que son alérgicas. Las reacciones alérgicas a las frutillas o cerezas son las más comunes.
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