Dolor de cintura y caderas. Dolor en la zona lumbar. Molestias en la espalda baja. Hernias, pinzamientos, lumbalgias. Son algunas de las consultas más frecuentes en los consultorios de traumatólogos, kinesiólogos, fisiatras y osteópatas. También, un problema que escuchan con frecuencia los profesores de yoga. Hablamos con un experto para entender las causas de estos síntomas, las patologías que pueden advertir y cómo tratarlas.
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Dolor de cintura y caderas
Movida Sana consultó al Lic. Aníbal Patricio Scharovsky, kinesiólogo, fisiatra y osteópata, director de la Escuela de Movimiento y de Maas Yoga, para entender las causas de uno de los problemas de salud más frecuente en estos días: dolor de cintura y espalda, dolor en la zona lumbar o dolor en la espalda baja.
Quienes lo sufren, llegan a la consulta o centros de yoga distintos nombres para un malestar de altísima prevalencia en tiempos de mucho sedentarismo y poca conciencia de la importancia de cuidar la columna y la flexibilidad.
¿Por qué es tan frecuente el dolor de cintura y caderas? ¿Qué pasa en esta parte del cuerpo y qué es lo observan? ¿A qué se debe?
Es común en ambos sexos. Cuando hablamos de dolor de caderas hay que hacer una distinción: la mayoría de las personas llama dolor “de cadera” al dolor de la articulación sacro-ilíaca (parte posterior del cuerpo, cerca o en los glúteos) o a las molestias en el trocánter mayor del fémur (cara lateral del muslo).
Las caderas y su dolor deberían manifestarse internamente, pero se sienten más en la cara anterior, en el pliegue inguinal, allí donde va el aro inferior de una bombacha o slip en un hombre. La causa principal suele ser la cantidad de horas sentados en malas posiciones, sumado a falta de elongación y buen tono de los abdominales.
Por supuesto que a esto se le suman los trastornos inflamatorios producto de una mala alimentación/digestión y otros temas ginecológicos o viscerales que pueden manifestarse en forma de dolor lumbar.
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Muchas veces oímos hablar de dolor lumbar por "acortamiento". ¿Qué quiere decir? ¿Cómo se trata?
Existen ciertos grupos musculares o cadenas musculares, como las llaman algunos maestros, que se hallan acortados o espasmados en casi todas las personas, con diferentes grados, por supuesto. Llevamos relativamente poco tiempo parados como especie.
En nuestra evolución a la bipedestación como humanos han pasado apenas segundos desde que estamos sobre los pies. Y en nuestra evolución natural nos hemos topado con las sillas, dispositivos electrónicos, etc, que nos han desviado de aquel hombre que estaba caminando en busca de su alimento.
Según un maestro mío, el Homo Erectus está en extinción por el Homo Sentadus y allí radican varios de nuestros problemas
Como tratamiento, me gusta pensar en el Yoga, que es una disciplina milenaria y muy completa, porque toma muchos aspectos importantes, como la meditación y otras prácticas respiratorias, que ayudan a la salud integral de la persona. Por supuesto que existen otras técnicas y tratamientos (en caso de ser realmente preciso un tratamiento), pero en mi experiencia es una gran aliada para aliviar estos problemas.
¿Es frecuente que el dolor de cintura y caderas se den juntos? ¿Por qué?
Volviendo a la pregunta del principio no creo que el verdadero dolor de caderas se de en conjunto con el de cintura. El dolor de caderas responde generalmente a fenómenos artrósicos y , salvo deportistas de elite o enfermedades inflamatorias raras, suele darse a partir de la quinta década de vida.
El dolor lumbar y de la articulación sacroilíaca sí suelen darse asociados por proximidad y porque son afectados muchas veces por las mismas estructuras y posturas sedentarias.
¿El abordaje y el tratamiento deben ir en conjunto también?
El abordaje puede ser mediante el movimiento o planes de autotratamiento y prevención como los que hemos desarrollado en la Escuela de Movimiento. En caso de ser un dolor invalidante o ser muy repetitivo, pueden elegirse entre los distintos tratamientos físicos, farmacológicos o, en caso extremo, quirúrgico, recordando siempre dos principios:
- Los dolores de origen mecánico no pueden ser solucionados químicamente, a lo sumo se aliviarán pero no es la intervención ideal.
- Tratar de privilegiar cambios de vida y hábitos saludables que empoderen y responsabilicen al paciente y eviten futuros episodios y recaídas.
La gradualidad en la terapéutica elegida es clave: menos es más muchas veces.
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¿Cuáles son las principales causas de dolor lumbar?
Son muchas y cada caso debe ser evaluado. Tener una hernia de disco lumbar no quiere decir que, indefectiblemente, esa sea la causa del dolor. Existen varios trabajos de investigación que están demostrando que muchas personas con hernias de disco son asintomáticas.
Por ello, cuando nos duele y nos hacen una resonancia magnética que dice, por ejemplo, hernia L4-L5, no quiere decir que hemos hallado LA causa. Probablemente, tengamos esa hernia desde hace años, porque no se crea en un día, y la gota que rebalsó el vaso fue una tensión intestinal, ginecológica, el atrapamiento de un nervio u otra que le impide al sistema convivir “en paz” con la hernia.
Resolvemos esa otra causa o simplemente bajamos el tono de algunos músculos elongando y la hernia vuelve a ser silenciosa y nos la olvidamos hasta el próximo episodio.
¿Cómo abordan desde la perspectiva del yoga el dolor lumbar y el dolor de caderas o de las ingles?
El Yoga posee múltiples herramientas para mejorar el funcionamiento de nuestro sistema músculo-esquelético, emocional y nuestra postura y modo de movernos. Para ello es preciso concurrir a un profesor de Yoga con experiencia en Yogaterapia, que haya recibido una buena formación para comprender las particularidades y necesidades de ese alumno con dolor.
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En nuestra escuela los profesores cursan un Profesorado de Yogaterapia de 200 horas que incluyen 6 formaciones y prácticas para el correcto abordaje de alumnos con dolor o limitaciones que pudieran llevarlo al dolor en caso de una mala práctica.
Los fisiatras y traumatólogos advierten que algunas posturas de yoga son contraproducentes para el dolor lumbar. ¿Hay posturas a evitar?¿Debe ser personalizada la clase o indicación?
En el 90% de los casos esta indicación se debe al desconocimiento y la falta de práctica del Yoga por parte de estos profesionales. De todos modos, como decía en la pregunta anterior, es verdad que existen profesores a los que les falta una correcta formación en anatomía, biomecánica y patología para abordar a estos alumnos con dolores y características especiales.
Alguna mala experiencia de ellos puede haberlos llevado a ser recelosos, pero las estadísticas de lesiones en práctica de Yoga son bajísimas y es más el desconocimiento el que lleva al temor como en otros aspectos de la vida.
Por supuesto que, en presencia de dolor o patología, hay posturas que deben ser evitadas, otras que deben ser adaptadas y algunas privilegiadas.
En Maas Yoga centramos nuestra práctica de Yogaterapia en esta especie de semáforo donde algunas posturas van en “rojo”, prohibidas, otras en “amarillo”, adaptadas y en “verde” las que consideramos que van a traer alivio y restauración.
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Por ello es importante que mejore el nivel de nuestros profesores de Yoga para que cada vez haya más pacientes practicando Yoga con los cuidados del caso y esta práctica sea incorporada al equipo de salud, como ya pasa no solo en la India sino en muchísimos otros países.
¿Es el yoga un buen aliado para el dolor de espalda? ¿Desde qué lugar aborda el problema?
Por esto que explicamos: es una excelente herramienta de abordaje y, sobre todo, de prevención de futuros episodios, ya que el dolor lumbar tiene la característica de ser recurrente.
El Yoga elonga aquellos músculos y cadenas musculares en tensión crónica, fortalece el core abdominal tan flojo en la mayoría de las personas y lleva al alumno a un estado más meditativo o, al menos, de control del estrés, que tiene gran incidencia en este tipo de dolores
¿Hay ejercicios lumbares recomendados para todas las edades y problemas o son ejercicios para el dolor de espalda específicos?
Por supuesto que hay ejercicios específicos. Por ello, cuando hay dolor o patologías lumbares, es mejor comenzar con clases de Yogaterapia para ir avanzando con calma y certeza.
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Para el autotratamiento y alivio específico hemos desarrollado la Escuela de Movimiento, que es una escuela de pacientes... ¡E impacientes! :))) Allí aprenden ejercicios simples y seguros para el pasaje del dolor y no es necesario tener experiencia previa en Yoga, ya que pueden ser realizados por cualquiera gracias a su enorme simpleza y seguridad.
Incluimos en la Escuela de Movimiento clases teóricas para pacientes y alumnos porque creemos -y está ampliamente demostrado por investigaciones- que quien conoce y comprende su afección va a obtener mejores resultados y se va a responsabilizar y empoderar en sus cuidados
¿Se puede hacer yoga cuando hay pinzamientos o hernias?
Sí, pero con un profesional muy bien formado y en un ambiente de Yogaterapia. Existen muchas formas de adaptar el Asana al alumno y no el alumno al Asana, como nos gusta decir en nuestra Escuela.
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Hay diagnósticos, como la sacroileitis y el pinzamiento lumbosacro, que se escuchan con frecuencia. ¿Qué son y cómo lo abordan?
Si te respondo como Kinesiólogo u Osteópata, la respuesta es diferente. Desde el Yoga o la Escuela de Movimiento contamos con interrogatorios y modos de observación que hemos desarrollado para guiarnos por la sintomatología de la persona y eso nos da mucha seguridad.
No aspiramos a que un profesor de Yoga se ponga a analizar las resonancias magnéticas de los alumnos porque eso sería irreal, y es clave recordar el lugar de cada uno en el equipo de salud. El profesor de Yoga debe conocer el suyo y no invadir campos profesionales ajenos. Pero sí le damos a los alumnos la formación que les permita conocer a esas patologías y saber cuáles son los cuidados y riesgos de cada una.
¿Cuál es nuestro objetivo? Que puedas ir a una clase de Yogaterapia y decirle a tu profesor que tenés una sacroileítis o determinado tipo de hernia discal y que el docente sepa de qué se trata, te transmita seguridad y te pueda dar una buena clase que te alivie o al menos no te empeore.
A veces el alivio tarda en llegar y eso ocurre en general con cualquier clase o tratamiento, pero, mientras transitás el camino, es importante que tu práctica sea segura y disfrutable. Es muy importante que las personas con dolor no se paralicen
En otros tiempos, a las personas con dolor lumbar se les indicaba reposo y la ciencia y los nuevos estudios demostraron que parar no moverse es contraproducente y genera mayor discapacidad lumbar.
Fuente: Lic. Aníbal Patricio Scharovsky, Director Escuela de Movimiento y Director Yogaterapia Maas Yoga. Kinesiólogo Fisiatra (Universidad de Buenos Aires, UBA), Osteópata (EOBA, UBA), RPG (Univ, Saint Mont, Francia) y exdirector del Postgrado en Columna Vertebral de la UBA.
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