Todos conocemos ese sentimiento a las 2 de la mañana cuando no podemos dormir y morimos por comer algo dulce. O a las 4 de la tarde en el trabajo, cuando todavía nos faltan dos horas más de tareas y deseamos medialunas para acompañar el mate o un chocolate con el café. Te contamos cómo evitar el antojo de "algo dulce".
Sin embargo, consumir alimentos con altos niveles de azúcar no solo tiene consecuencias para tu cintura, sino también para tu humor, tus emociones y tu salud en general. De hecho, el antojo por algo dulce es un signo de que tu cuerpo necesita energía, y rápido.
Cómo podemos evitar los antojos dulces
Algunos consejos para combatir las ganas urgentes de comer ciertas cosas.
Reconocé lo que pide tu cuerpo
Si bien esa torta helada parece ser justo lo que necesitás, no es la realidad de tu cuerpo. Podés tener antojo de algo dulce por muchos motivos. Puede significar que pasaste varias horas sin comer o que tu última comida no fue lo suficientemente grande. En resumen, que tu cuerpo necesita energía y el azúcar es nuestra fuente preferente para recargar baterías. Pero no por eso la mejor. Una buena solución es no saltarse comidas ni colaciones.
Es la hora
Quizá se debe a un hábito que nos autogeneramos. Si nos acostumbramos a comer algo dulce mientras miramos televisión a la noche o a las tres de la tarde, es muy probable que a esa hora sintamos la necesidad de comer algo dulce. Tenemos que enfrentar esta situación y darnos cuenta que se trata de una insana costumbre que tenemos que cambiar.
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Comé comida saludable y la porción adecuada para vos
Cuanto más satisfecho te sientas, menos probable será que sucumbas ante la tentación de comer una medialuna rellena de dulce de leche. Lo mejor es respetar los horarios de cada ingesta y alimentarnos bien con comida saludable.
No saltées comidas
También es recomendable comer algo sano cada tres horas. Otro tip es intentar comer snacks con azúcar natural como fruta, un yogur con cereales o un puñado de pasas de uvas o frutos secos.
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Un punto fundamental es jamás saltearse el desayuno, es fundamental para tener energía suficiente para el resto del día
Decile si a los postres (a veces)
Parece contradictorio pero no lo es. No tenemos que evitar todos los postres ni restringirnos porque los antojos serán más fuertes. Podemos comer un postre de vez en cuando.
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Cómo verás todo es cuestión de práctica y costumbres, cambiar hábitos lleva su proceso y su tiempo pero si es en beneficio de nuestra salud valdrá la pena el esfuerzo. Comenzá hoy mismo a pensar cómo organizar mejor tu plan de alimentación, horarios, ingestas, colaciones y no te olvides de incluir los postres. Todo en su justa medida no daña.
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