Cuestionó más de una vez la "vida digital", pero entiende que, con un uso controlado, puede ser un gran aliado del bienestar. Por eso, el Dalai Lama le encargó a uno de los psicólogos más prestigiosos de la actualidad, Paul Ekman, el desarrollo de un sitio web con un novedoso atlas emocional que nos ayude a entender mejor cómo funcionan las cosas en el terreno de las emociones y nos enseñe herramientas para gestionarlo de manera más saludable y feliz.
Erkman, pionero en el estudio de las emociones humanas y consultor para empresas como Disney (sus teorías científicas inspiraron la película Inside Out, estrenada el pasado año), compartió el proyecto con su hija, Eve Ekman, que es muy reconocida en el ámbito de la medicina integrativa.
El Atlas de las Emociones es un recorrido visual que nos permite entender cómo fluyen las principales emociones que nos habitan. "Nuestras emociones son el verdadero elemento perturbador. Tenemos que conocer la naturaleza del enemigo", dice el Dalai Lama. Justamente, el Atlas tiene el propósito de ayudar a entender mejor las distintas emociones y sus efectos en los individuos. La falta de control sobre las emociones, explica, es uno de los factores causantes de estrés. Entenderlo mejor, hacerlo consciente, permite una mayor control sobre uno mismo.
El Atlas permite un recorrido visual quiere ayudar a entender mejor las distintas emociones y a tener un mayor control sobre uno mismo
Para desarrollar el mapa emocional, Ekman investigó durante casi dos años cuáles eran las emociones básicas, su naturaleza y los diferentes estados de ánimo asociados a las mismas. Así, elaboró un Atlas que parte de cinco emociones principales: ira, miedo, disgusto, tristeza y felicidad.
Sobre esta base, pensó una manera de elaborar un cierto ordenamiento que permitiera entender el universo de las emociones de manera comprensible y atractiva. Para ello, contó con la colaboración del estudio Stamen, que se encargó del diseño y el desarrollo.
El Atlas tiene cinco grandes categorías: ira, miedo, disgusto, tristeza y felicidad. Cada una de ellas conecta con una serie de emociones, acciones, motivaciones y estados de ánimo asociadas. Al hacer click en cada uno de los 5 continentes, podemos visualizar el rango de estados emocionales relacionados, ordenados de menor a mayor intensidad. Por ejemplo, en el caso del miedo se encuentra desde la inquietud (en el nivel más bajo) hasta el terror (el más alto), pasando por otros intermedios como la ansiedad o la desesperación.
Cada uno de los estados emocionales, a su vez, conecta con las diferentes acciones asociadas que pueden ser intrínsecas o intencionales, destructivas o constructivas. Así, el recorrido continúa hasta llegar a diferentes estados de ánimo. El punto final es la calma, que los autores definen como un estado base necesario para comprender las emociones cambiantes.
"Con el Atlas de las Emociones no queremos solamente brindar conocimientos, sino crear un ser humano feliz. Familia feliz, comunidad feliz y, finalmente, humanidad feliz”, destacó el Dalai Lama al New York Times.
