Estar sentado todo el día ha derivado en una epidemia de sedentarismo que afecta seriamente la salud y multiplica las chances de padecer enfermedades varias. Cada vez más estudios alumbran las consecuencias de pasar tantas horas sin moverte de la silla, que pueden ser igual de graves para tu salud que fumar y comer mal.
Si te pasás cinco de los siete días de la semana sentado en el trabajo, las implicancias para tu salud pueden ser realmente serias. Según un estudio reciente realizado en la Universidad de Columbia tenés el doble de posibilidades de morir joven en comparación con aquellos que no calientan silla.
Los investigadores analizaron la salud de más de ocho mil personas desde los 45 años en adelante, con la escalofriante conclusión de que aquellos que se pasaban más de 90 minutos sentados al día tenían más posibilidades de morir jóvenes en comparación con los que no.
Monika Safford, una de las personas que lideraron este estudio, confirma que estar sentado “es el nuevo fumar”, ya que alrededor de 5,3 millones de personas mueren en el mundo cada año por culpa de la inactividad frente al 5,1 millones de personas que mueren por enfermedades relacionadas con el tabaquismo.
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Lo peor es que 90 minutos parecen pocos comparados con las seis, siete u ocho horas que pasamos cada día casi sin movernos. Hay días que, por las horas que pasamos en nuestro trabajo y las cosas que hay para hacer en casa, podríamos clasificar nuestro estado en el nivel "vegetativo".
Por todo ésto, volvemos a insistir en que moverse es clave, y proponemos soluciones. Se puede combatir un poco esa inactividad haciendo ejercicio después de ir al trabajo, caminando o montando en bicicleta, por poner algunos ejemplos. Claro que, según la OMS, ninguna de estas actividades compensa que nos pasemos el resto del día apalancados en el escritorio o sentados de reunión en reunión.
Hay que hacer más. Como dice Monica Safford, “necesitamos encontrar formas creativas para asegurarnos que reducimos la cantidad de tiempo que pasamos sentados e incrementar períodos de gran actividad”. Algunas ideas:
- Comprate un podómetro o contá tus pasos con un wearable o aplicación del teléfono. Paso a paso irás desafiándote y sintiéndote mejor. Según diversos estudios, la gente que utiliza un podómetro puede llegar a caminar hasta dos mil pasos más al día que los que no lo tienen. Un podómetro te ayuda a fijar objetivos, y ver cómo crece la cifra te anima a superarte y andar más.
- Date más de un respiro y parate más: según el estudio de la Universidad de Columbia, si cada treinta minutos nos damos un respiro y nos levantamos de nuestros sitios de trabajo podemos reducir drásticamente el impacto de tanta inactividad. En otras palabras: la perfecta excusa para ir al baño, a tomar ese café, rellenar la botella de agua y ya que estamos, enterarte de los últimos rumores.
- Trabajá de pie: usar un standing desks, esas mesas para trabajar de pie que se han puesto de moda en Silicon Valley, puede parecer una buena solución para movernos un poco más y quemar calorías. Pero no es la solución perfecta que nos intentan vender. Hay estudios que revelan que resulta más cansador, incrementa de forma dramática los riesgos de arterioesclerosis y la carga adicional del sistema circulatorio, y también aumenta los riesgos de tener varices.
- Achicá los tramos de transporte público o auto en los traslados: bajate antes del colectivo o subte, da una vuelta a la manzana en el almuerzo, subí escaleras... Todo lo que ayude a moverte es fantástico para tu salud.
