Las ‘superbacterias’ o bacterias resistentes a los antibióticos constituyen a día de hoy la primera causa de muerte en los hospitales y, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), son una de las principales amenazas para la salud pública en todo el mundo. En este marco, un flamante estudio realizado por científicos del Instituto de Investigación Scripps en La Jolla (EE.UU.), alumbra una posibilidad que parece funcionar muy bien.
Los investigadores están diseñando un nuevo superantibiótico que podría terminar este problema. Lo que proponen es modificar los antibióticos ya disponibles para ver si así se logra que recuperen sus ‘poderes antimicrobianos’.
El estudio, publicado en la revista "Proceedings of the National Academy of Sciences" revela que la modificación estructural de un antibiótico denominado ‘vancomicina’ confiere al fármaco nuevos ‘superpoderes’ para combatir a las bacterias resistentes.
Los autores estiman que esta nueva versión de la vancomicina supone un avance que podría eliminar la amenaza de las infecciones resistentes presentes y futuras
Como explica Dale Boger, director de la investigación, "los médicos podrán utilizar esta versión modificada de la vancomicina sin miedo a las resistencias emergentes".
El poder (y el riesgo) de los antibióticos
El descubrimiento y desarrollo de los antibióticos constituye uno de los avances más importantes alcanzados en la Medicina. Son los fármacos encargados de eliminar las bacterias y han logrado curar algunas de las enfermedades infecciosas más mortales de la Historia. El problema es que cuando estos antibióticos son utilizados de manera abusiva o errónea –para tratar enfermedades causadas por virus, por ejemplo–, pierden su eficacia. Así, las bacterias van mutando y adquiriendo ‘resistencia’ a estos fármacos, que dejan de ser útiles.
En este contexto, la vancomicina se presenta como el banco de pruebas ideal para el desarrollo de nuevos antibióticos. Esta droga lleva utilizándose en la práctica clínica por más de seis décadas, pero la aparición de bacterias resistentes frente a este antibiótico es muy reciente, un dato que sugiere que las bacterias tienen muchos problemas para superar el mecanismo ‘original’ de la vancomicina.
Como indica Dale Boger, "dado su poderío frente a las infecciones, la vancomicina podría tildarse de ‘mágica’
Además, nuestros estudios previos han demostrado que es posible añadir dos modificaciones a la vancomicina para hacerla todavía más potente. Con estas modificaciones, se necesita menos cantidad del fármaco para lograr el mismo efecto".
Los científicos aclara que aún hay margen para incluir aún más modificaciones. De hecho, el nuevo estudio describe la adición de una tercera alteración que otorga al antibiótico la capacidad de interferir con la pared bacteriana de una forma totalmente novedosa. De hecho, combinando las tres modificaciones, la actividad de la vancomicina se multiplica por 1.000.
En las pruebas que hicieron los investigadores los resultados fueron muy eficientes. Los autores la utilizaron para tratar enterococos resistentes y no resistentes al antibiótico ‘tradicional’, y la nueva versión los mató a todos
El proceso actual para lograr la vancomicina triplemente modificada requiere 30 pasos. Así, el siguiente paso de los investigadores será simplificar el proceso.