Muchas veces nos pasa que queremos sentirnos fuertes y con ganas de encarar el día pero el cuerpo parece no respondernos. No somos conscientes a veces que para cargarnos de energía es necesario activarse y ponerse en marcha.
La vida sedentaria es uno de los peores hábitos si uno busca sentirse y estar saludable. No hay nada peor que quedarse quieto. El sedentarismo se retroalimenta: es un círculo vicioso que amenaza nuestra salud.
Si no nos movemos empezaremos a sentir una notable pérdida de masa muscular y además la inactividad hace que se debiliten nuestros huesos.
Ante esta situación nos vamos a sentir más débiles y como correlato van a aumentar nuestras posibilidades de padecer artritis, artrosis u osteoporosis en el futuro. Como una cadena imposible de frenar esta situación nos deja en la puerta de la aparición del sobrepeso y claro, el sobrepeso y la falta de acción aumentan las posibilidades de contraer una enfermedad cardiovascular.
El estilo de vida sedentario es una de las 10 causas principales de mortalidad, morbilidad y discapacidad; y además se ha convertido en el segundo factor de riesgo más importante para la salud, después del tabaquismo, nada menos.
Cómo cortar este círculo vicioso y adictivo de desgano y fatiga
Lo que nunca debemos olvidar es que al sedentarismo es necesario prevenirlo desde los primeros años de vida de los chicos. ¿Y cómo se previene el sedentarismo?
- Con la adopción de un estilo de vida “activo” que incluya la práctica de ejercicio físico regular y a diario.
- Es aconsejable que realicemos 30 minutos diarios de actividad física. Éstas pueden incluir desde salir a pasear con el perro a bailar o a practicar un deporte.
- Hay una increíble variedad de opciones para elegir si querés tener una vida saludable. Lo importante es empezar ya.