Cómo funciona el método sueco para combatir el estrés

Suecia tiene los índices más altos de bienestar. Está entre los países más felices del mundo, con mayor tolerancia y libertad. ¿A qué se debe que puedan vivir de manera tan armoniosa?

Son los creadores de la decoración minimalista, funcional, no dependen de los objetos, adoran la naturaleza, visten ropa cómoda y evitan la complejidad.

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No es casualidad, se trata de un estilo de vida que adopta la simplicidad como forma de vida: el 'lagom'. Esta palabra significa 'casi perfecto', 'suficiente', 'adecuado', 'tanto o tan bueno como debería ser' y para ellos es un mantra.

Pasos para alcanzar el equilibrio sueco

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Hablar menos y escuchar más: acaparar la conversación para los suecos significa perderse detalles y oportunidades de observación.
Desayuno en etapas: en el país nórdico el desayuno debe ser un momento de paz. En lugar de darse el clásico banquete norteamericano, ellos prefieren hacerlo en etapas incluyendo primero los carbohidratos y luego los lácteos.
Momento 'fika': esta palabra hace referencia a la pausa en la que acompañados por un café y un bollo de canela se encuentran dos amigos. Los suecos se toman este recreo al menos dos o tres veces al día como forma de desconectar y dejar respirar la mente.
Dieta realista: comer lo que queremos en cantidades equilibradas. Podemos comer chocolate, una pizza o tomar una cerveza pero con moderación. Todo en su justa medida.
Meditación: un espacio para escuchar el cuerpo y la mente. Según el lagom es la única forma de encontrar el balance. Esta es la razón por la cual en el país nórdico son tan usuales los masajes, los spas y los saunas. Además podés leer: Cómo meditar en casa: técnicas y consejos para principiantes
No: a diferencia de lo que ocurre en el resto de Europa, los suecos saben decir que no sin rodeos. No toman la negativa como algo personal sino como la declinación de una propuesta inoportuna. Esta es una forma de gestionar el exceso de compromisos, una causa más de estrés.
Deporte y naturaleza: la clave es incorporar los hábitos como parte de nuestra cotidianeidad para no sentirlos como un esfuerzo extra. Por ejemplo, ir al trabajo en bicicleta. Además, para ellos la vida al aire libre es fundamental para lograr un bienestar general y desde que van a la escuela se los educa para que amen la naturaleza.
No hay mal tiempo sino mal vestuario: se trata de un refrán sueco que intenta transmitir la necesidad de ser prácticos y usar capas superpuestas de ropa para combatir el frío del invierno nórdico y poder estar bien dentro de un edificio.
Menos es más: Coco Chanel no fue la primera en adoptar esta filosofía. La elegancia de la sencillez es una virtud nórdica por excelencia donde apuestan por la decoración minimalista, el vestuario simple, los colores neutros. Se trata de apreciar la funcionalidad, la calidad y la belleza de la armonía.
El tiempo del otro es valioso: los suecos son puntuales en casa, en el trabajo y con los amigos. Se trata de ponerse en el lugar del otro y comprender que no podemos disponer del tiempo ajeno como queremos.