La tangoterapia se impone. Desde cuadros cardíacos hasta la depresión, pasando por el mal de Parkinson y otros males: según los expertos, el baile porteño por excelencia se afianza como excelente aliado a la hora de tratar o aliviar los síntomas de diferentes enfermedades.
Según los expertos, los beneficios son múltiples. Incluso entre las personas mayores, el dos por cuatro es sinónimo de envejecimiento saludable, ya que los movimientos de esta danza refuerzan el equilibrio postural y ayudan en la rehabilitación de dolencias coronarias.
Puede leer: Tango y salud: 10 razones para sacar viruta al piso
Beneficios de la tangoterapia
Diversos estudios han demostrado que los beneficios de la tangoterapia son muchos: los enfermos se recuperan más rápido, que muchos pacientes dejan de necesitar medicación y reducen su discapacidad.
El doctor Federico Trossero, psiquiatra clínico y psicoanalista rosarino y autor del libro y del sitio “Tango Terapia”, explica: "Su acción terapéutica reside, fundamentalmente, en la intensidad y la profundidad de las emociones que despierta el tango cuando se baila y se escucha su música o su poesía".
La tangoterapia entiende a esta danza como un gran aliado del bienestar y la salud, ya sea para preservarla, mejorarla o tratar enfermedades específicas
Según el especialista, "el tango nos pone en contacto con nuestras dificultades, cualidades o conflictos, en una clarísima y contundente muestra de cómo somos y cómo interactuamos con la pareja y el grupo. Esto nos ayuda a superar las barreras de nuestro desarrollo personal y llevar adelante una vida plena de realizaciones y goce", dice.
Durante el III Congreso Internacional de Tangoterapia, realizado en Buenos Aires, se presentaron diversas experiencias al respecto. El cardiólogo Roberto Schena, presidente del Congreso, destacó: "Estamos dando los primeros pasos para conocer con mayor intensidad lo que significa la tangoterapia. Queremos que, como ha ocurrido con la danzaterapia, se convierta en una carrera”.
Puedes leer: Tango y neurociencias: por qué hace bien al cerebro y favorece la longevidad
Investigaciones de la Fundación Favaloro también demostraron que el tango "es muy efectivo en la rehabilitación de enfermos coronarios, en quienes sufrieron un ACV, y para la hipertensión arterial".
La psicóloga Rosa Sosnitsky descubrió las “propiedades” del tango cuando, en su otro rol de cantante, iba a los geriátricos. Al investigar la influencia de la música en la recuperación de la memoria, notó que los ancianos "tenían mayor participación con música de tango, porque había estado fijado en edad temprana. Si no hablaban, empezaban a poder hablar y a recordar letras de canciones. Tiempo después, esas personas progresaban en la comunicación. "Quienes lo habían bailado de jóvenes y ahora tenían temor a las caídas, se animaban a hacerlo, porque el abrazo da contención y seguridad", contó.
Los especialistas señalan que para potenciar las bondades terapéuticas del tango hay que elegir aquellos que no sean depresores, con temáticas positivas como la amistad, el amor a la madre, el barrio, etc.
Tangoterapia: cómo influye el tango en la mejora de algunas enfermedades
- Depresión: Incentiva a tener una actividad social, con mayor adherencia que las actividades físicas convencionales.
- Espasticidad y mal de Parkinson: Aumenta la agilidad y firmeza en los movimientos y de ese modo refuerza el equilibrio.
- Enfermedades cardíacas e hipertensión: Disminuye las hormonas vinculadas con la actividad simpática (las que producen taquicardia, hipertensión y vasoespasmos), y mejora la capacidad vascular.
- Disminución sensorial: El bailar, escuchar e interpretar el tango ayuda en el mecanismo de expresión de las emociones.
- Esquizofrenia: Como la patología emocional distorsiona la imagen corporal, y, por lo tanto, la comunicación, el tango da una estructura y ayuda en la elaboración de la imagen corporal y en la comunicación.
Además, bailar tanto mejora la autoestima. Es una excelente manera de autoexplorarnos, tomar conciencia de nuestro cuerpo y entrenar el equilibrio. Es más: el vínculo con el otro bailarín y la comunicación corporal ayudan a ser más perceptivos con el entorno y contribuyen a aumentar la sensibilidad erótica.
Puedes leer: Meditación mindfulness: el arte de recuperar la calma
Seguí leyendo:
- Somatizar: cuando los signos de la ansiedad se reflejan en el cuerpo
- Facundo Manes explica el cerebro adicto: ni debilidad moral ni falta de voluntad
- Cómo conservar el cerebro joven: claves imperdibles para no perder materia gris
- Nutrición y cerebro: Facundo Manes explica por qué es clave la alimentación
- Facundo Manes: sobre cómo el cerebro archiva los recuerdos que duelen
- Facundo Manes: mejorar la calidad de vida cuando el cuerpo duele todos los días
- Facundo Manes: atravesar los duelos, un proceso entre aferrarse y soltar
- ¿Mente inquieta? 5 consejos de Facundo Manes para mejorar la concentración
- Facundo Manes: claves para entender la paranoia