Un flamante estudio publicado en el New England Journal of Medicine reveló que el Covid-19 es capaz de sobrevivir sobre superficies de acero, plástico y cartón hasta 72 horas. Estamos hablando de cuatro días de capacidad infectiva sobre esas superficies, con lo cual podemos decir que es atinada la pregunta que se hace mucha gente: ¿puedo contagiarme coronavirus en el supermercado? Aquí, las respuestas.
Otro riesgo tiene que ver con el virus que puede haber en el aire en suspensión: investigadores de la Universidad de California Los Angeles (UCLA), la Universidad de Princeton y los Institutos Nacionales de Salud Pública de los Estados Unidos (NIH) advirtieron que el coronavirus tenía la capacidad de mantenerse viable en el aire hasta tres horas.
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Los datos están claros, pero es importante entender qué significan. ¿Nos podemos infectar al respirar partículas del virus flotando en el aire en la calle o en el supermercado? ¿Podemos contagiarnos tocando un paquete o un alimento en una tienda o mercado? ¿La ropa puede transmitir el virus? ¿Qué podemos hacer para evitarlo?
Para resolver tantas dudas, el diario español La Vanguardia consultó a Xavier Abad, jefe de la Unidad de Alta Contención Biológica del IRTA-CReSA y profesor asociado de la Universitat Autònoma de Barcelona. "Tenemos que tener claro que el coronavirus no está en todas partes, acechándonos para infectarnos. Por tanto, ante cualquier miedo que nos asalte, lo primero que tenemos que pensar es si es realmente probable o posible que la situación que imaginamos se haya dado”, comentó.
Compartimos sus respuestas, sumadas a información científica de la OMS y otros organismos prestigiosos para que puedas cuidarte sin caer en pánico ni medidas que generan estrés psíquico sin necesidad
¿Puedo contagiarme simplemente al respirar en la calle?
No. Para empezar, no toda la población está infectada, y la que está infectada no libera virus en cada exhalación. Por lo tanto, las personas que caminan por la calle o están en un espacio, no están todas liberando virus al ambiente. Además, cuando respiramos o exhalamos en un espacio exterior, como una calle, nuestro aliento se diluye al instante en el volumen inmenso de aire de ese espacio, donde, por si fuera poco, las condiciones no son estáticas, sino que siempre hay algo de desplazamiento del aire, viento.
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¿Puedo contagiarme coronavirus en el supermercado o en la oficina?
En supermercados o oficinas hay menos volumen de aire que en la calle, pero estos espacios suelen tener sistemas de circulación de aire o aire acondicionado que, si no recirculan el aire, ayudan nuevamente a la dilución, por lo que es muy poco probable que se produzca un contagio si se respetan las recomendaciones de seguridad y no haa aglomeraciones ni una densidad elevada de personas.
¿Me puedo contagiar al tocar productos en el supermercado?
Lo primero que habría que preguntarnos es si realmente el virus puede haber llegado hasta aquel producto en cuestión. “Damos por sentado que ha llegado, pero no debemos pensar que todo tiene virus y que, por tanto, lo toco y me infecto directamente”, insiste Abad, y aclara que es altamente improbable que, al tocar un producto en el supermercado, haya coronavirus con capacidad infectiva en él y nos contagiemos.
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Aún así, para sentimos intranquilos, una manera fácil de evitar un remoto contagio sería limpiar los envases al llegar a casa o retirar el envase exterior y tirarlo a la basura, como en el caso de los yogures, que suelen venir envueltos en un cartón. A continuación, lavarse bien las manos.
¿Me puedo contagiar al recibir un paquete de un servicio de mensajería?
La piel sana es una barrera muy efectiva contra los virus en general y contra el coronavirus, que no puede entrar al organismo a través de la piel intacta. Solo cuando nos tocamos la cara y en particular las mucosas nasal, bucal o ocular con las manos contaminadas corremos peligro de infección. Por tanto, lo más efectiva es, una vez que recibís el paquete y lo guardás, lavarse muy bien las manos con jabón. Es importante tener en cuenta que, en cartón, los datos experimentales indican que el SARS-CoV-2 pierde su infectividad con rapidez.
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Los bienes en el interior del paquete, ¿pueden contener coronavirus?
Si en estos días de confinamiento hiciste compras por internet, no hay que temer por un posible contagio. Desde que se produjo el objeto que has comprado, se envasó, se envió, se recibió en un centro de logística, se llevó a un almacén y luego llegó a tu casa, deben haber pasado semanas o meses. Aunque el coronavirus hubiera estado allí en un principio, lo que ya es muy improbable, al recibir el producto estará inactivo, sin capacidad de infección.
¿Se contagia el coronavirus a través de la ropa?
En IRTA-CReSa están, precisamente, empezando a diseñar pruebas para ver cómo se comporta y persiste el virus en diferentes materiales, entre ellos tejidos. Al parecer, tanto en la ropa como en el papel, al ser superficies porosas, el virus quedaría ‘secuestrado’, aunque no se sabe si totalmente inactivo.
En la ropa, el virus penetra en el material, por lo que es muy improbable recuperarlo e infectarse
En superficies como en metales o plásticos, el virus queda adherido a la superficie, sin poder penetrar en ella; por eso cuando pasamos el dedo por encima, corremos el riesgo de llevárnoslo. En cambio, en papel y textil, algodón e incluso látex, es mucho más difícil recuperar el virus, que penetra y se une con mayor intensidad a las moléculas del material poroso. En el caso de las telas, como no se puede recuperar, no te podés contaminar.
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¿Cómo abro las puertas de la oficina o del edificio en que vivo?
Puedes utilizar un pañuelo de papel para agarrar el picaporte, que luego tires a la basura. También es recomendable dejar las puertas sin pestillo, abiertas, para que se puedan empujar con el pie o la cadera y evitar así tocarlas con las manos.
¿Qué hago con los zapatos?
Puede ser buena idea dejarlos a la entrada de casa. No hace falta desinfectarlo, aunque si se desea mayor seguridad, se les puede pasar un trapo con lavandina diluida. Pero es muy poco probable que puedan haberse quedado virus enganchados en los zapatos y que luego estos puedan infectar a una persona en tu casa.
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