El sarampión es una infección causada por un virus. Se contrae por lo general a fines del invierno y durante la primavera. Cuando algún portador del virus tose o estornuda, las gotitas que contienen el virus se esparcen por el aire y se depositan sobre las superficies vecinas.
La doctora Carina Balasini y la doctora María Gabriela Vidal explican que si bien es una enfermedad prevenible por vacunación, a nivel mundial sigue siendo una de las principales causas de muerte en niños pequeños, a pesar de que existe una vacuna segura y eficaz.
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“Uno de los motivos por los que el sarampión aún no fue erradicado del planeta es porque muchas personas todavía deciden no vacunar a sus hijos, aun cuando tienen acceso a la inmunización” comentan ellas.
El principal problema del incumplimiento del calendario de vacunación es que los chicos quedan desprotegidos ante un posible contagio pero a su vez esto puede generar un regreso de la enfermedad, que estaba erradicada en Argentina desde el año 2000.
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Y ante un brote de sarampión, los niños de más de un año pueden ser vacunados, pero los menores de 12 meses quedan expuestos seriamente a este mal. ¿Qué podemos hacer con ellos para prevenir el contagio?
Consultada por la publicación Rumbos, la médica pediatra Mariana Castagnino explica que “Si es menor de un año, hasta los seis meses se supone que pasan los anticuerpos de la madre, con lo cual hasta esa edad sería muy difícil el contagio” – y agrega- “A partir de los seis meses la mejor prevención es tratar de evitar el contacto con una persona con sarampión. La única forma de contagio es de persona a persona a través de las gotitas de la saliva”.
“En el caso de un familiar infectado también podría recomendarse la vacunación del bebé a partir de los 6 meses de edad”
“Algunos padres se muestran dudosos en vacunar a sus hijos porque dicen que ‘las vacunas no funcionan’. Pero ante la información de lo que significa ‘vacunar’, la protección que genera a sus hijos otorgándoles inmunidad en etapa temprana de la vida, que los ayuda a evitar contraer enfermedades graves que son prevenibles y que puede traer consecuencias con riesgo sus vidas. La vacunación sigue siendo y será siempre importante porque gracias a eso se han erradicado enfermedades“, sentencia la Dra. María Cecilia Avancini, médica pediatra y Jefa de Pediatría de vittal.
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Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), durante todo el año 2017, cuatro países de América reportaron casos de sarampión. En 2018, hasta el 18 de marzo, ya eran nueve los países que habían informado de casos de esta enfermedad.
En el último año se ha registrado un brote en Venezuela (con al menos 886 casos confirmados) que se hizo extensivo a Brasil y Colombia. Pero también se registraron casos en Estados Unidos, Perú, Antigua y Barbuda, Guatemala, Canadá y México. Y por eso se está hablando de la proliferación de los movimientos antivacunas.
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