Hacer selfies se convirtió en un fenómeno mundial. No solo los famosos e influencers se la pasan subiendo autorretratos: todos, en general, lo hacemos. Comiendo algo rico, tomando un helado, con mi perro, paseando por algún lado, de vacaciones, corriendo, etc. Se ha vuelto normal. Sin embargo, los psicólogos y psiquiatras hablan de un problema en auge: qué es la selfitis y qué relación tienen con los trastornos obsesivos y los problemas de salud mental.
Se llama "selfitis" el hábito de tomar una sobreabundancia de fotos de uno mismo y publicarlas en Instagram u otras redes sociales. Es algo cada vez más frecuente y un fenómeno mundial: de hecho, el Daily Mirrow publicó un reportaje sobre un adolescente inglés que llegó a hacerse 200 'autofotos' por jornada.
Los expertos hablan de selfitis para describir un deseo obsesivo-compulsivo de tomar fotos uno mismo
Qué es la selfitis
Desde tomas glamorosas cuidadosamente retocadas hasta selfies extremos. Hay de todo y para todos los gustos. Alguien mostrando sus uñas nuevas o un mimo a su gato o algún "demente" colgado precariamente de un rascacielo. Las selfies son el alma de las redes sociales y ningún perfil está completo sin, al menos, algunas de ellas. Está tan extendido el fenómeno que muchos se han preguntado si estamos ante una verdadera generación de narcisistas…. La selfitis es el trastorno psicológico del que muchos especialistas en salud mental hablan en consultorios y congresos.
De hecho, la Asociación Americana de Psiquiatría (APA) ha dicho bien claro lo que ya sospechábamos: se llama 'selfitis', es un trastorno psicológico y tiene que ver con la falta de autoestima. ¿Sientes la necesidad irrefrenable de fotografiarte haciendo caras sensuales, mirando al horizonte o mostrando los resultados del gimnasio frente al espejo del baño? ¿Te sientes ansioso si no subes alguna selfie todos los días? Si la respuesta es afirmativa, tienes al menos un problema.
Se llama 'selfitis borderline' (en su versión más suave) y deberías hablar con un especialista. Eso sí, siempre podría ser mucho peor, porque, según la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), estás solo comenzando a padecer el síntoma. Pero no termina ahí: una fase más avanzada de la patología comenzaría en el momento en el que esas mismas fotos o similares para subirlas tres o más veces al día a tu Facebook, Twitter o Instagram.
Justin Bieber, Kim Kardashian o Miley Cyrus, con más de 17, 15 y 10 millones de followers respectivamente solo en Instagram, todos con una enorme voluntad recibir halagos, parecen sufrir este trastorno.
El artículo de la APA desglosó tres niveles del trastorno, incluida la selfitis límite, la selfitis aguda y la selfitis crónica, y señaló que, si bien no había cura para la selfitis, la terapia cognitiva conductual era un tratamiento eficaz.
Selfitis aguda
Estaríamos hablando entonces de 'selfitis aguda', que se define científicamente así:
- El deseo compulsivo obsesivo de sacar fotos de uno mismo y publicarlas en redes sociales como una forma de compensar la falta de autoestima y de llenar un vacío en la intimidad.
- Alto grado de ansiedad mientras se espera los comentarios que genera el contenido subido.
- Riesgo de llegar a lo que se llama "selfities crónica": superar las seis fotos diarias subidas a redes
Qué hay detrás de la selfitis: causas
Al parecer, el 'derrape' narcisista que supone la selfitis funciona, en realidad, a la inversa: cuanto más te "cuelgas" a ti mismo, más necesidad de reafirmación tienes. Es decir, más inseguro eres con respecto a tu propia imagen y todo lo que le rodea y más vulnerable de paso a las reacciones negativas de los otros. En un punto, funciona como una adicción cualquiera.
Selfitis es un problema... ¿Siempre?
Cuando hablamos de "selfitis" podemos hacer algunos matices, porque no todo es enfermedad. El fenómeno 'selfie', cuyo término se recogió por primera vez en 2002, evolucionó exponencialmente con la masividad de la doble cámara en los móviles. Hacerse alguna selfie y disfrutar las bondades de la tecnología no es problema ni un trastorno obsesivo compulsivo.
De hecho, los psicólogos explican que las 'selfies' en su justa medida son positivos, ya que revelan una aceptación de la propia imagen y, a la vez, dan una imagen más cercana y espontánea de quien es fotografiado. Es decir que, en su justa medida, es algo para disfrutar. ¿Qué opinas?
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