En innumerables ocasiones la evolución y el progreso personal se ven limitados por diferentes miedos. Se pierden o complican relaciones interpersonales, laborales, incluso grandes deportistas han frenado sus carreras debido al miedo.
Existe el miedo al amor, a la exposición, al éxito, tanto a la derrota como al fracaso, a la oscuridad, la enfermedad, la soledad, y otros tantos.
Poder eliminar el miedo es la llave para recuperar el equilibrio psicofísico. La meditación como herramienta es menos costosa que la medicación y más fácil que seguir leyendo libros de autoayuda.
Hay diferentes tipos de miedos:
- Miedos habituales
Fobia a los animales (ratas, arañas, insectos)
A la oscuridad
Al agua
A las alturas
A volar
- Miedos emocionales
Éxito
Exposición
Rechazo
Abandono
Engaño
Al dolor, tanto físico como emocional
- Miedos trascendentales
Muerte
A desaparecer, perder la identidad
Pérdida del estatus
Al futuro
Soledad
A la pobreza
Ahora bien, el miedo en sí mismo no se encuentra en el dinero o su ausencia ni tampoco en la araña ni en el balcón que produce el vértigo. El miedo reside en la mente. Reconocer esto permite diferenciar que es el individuo quien percibe la sensación, y que no es una amenaza externa sino una respuesta del propio sistema nervioso.
¿Cómo cambiar esto, cómo deshacerse del miedo, algo tan sutil que se encuentra en la mente? Citando a Santiago Barrenechea, instructor de técnicas de meditación desde hace 15 años “Por más férrea que sea la voluntad, es imposible controlar la mente con la propia mente. Como querer dormirse cuando se tiene insomnio o como esforzarse para no pensar. Contrario al mundo físico, donde para obtener un resultado es preciso accionar y hacer una fuerza, en el reino sutil de la mente, aquello que se resiste, persiste.”
Pasos para eliminar los miedos
1. Reconocerlo; darse cuenta del tipo de fobia
2. Sumergirse dentro de él; como por ejemplo quedarse en la oscuridad o mirando por el balcón que da vértigo.
3. Aplicar técnicas de respiración y meditación, y mecanismos de inteligencia emocional.
Haciendo referencia al punto anterior, la mente con la propia mente no se puede controlar. La clave se encuentra en la respiración. La respiración está íntimamente unida a la existencia: sin respiración, no hay vida. Con el nacimiento surge la inhalación, y el último acto en la vida es una exhalación. Dice Barrenechea, “Cada emoción se corresponde con un patrón de respiración particular: en la tristeza predomina la exhalación, al estar felices o enamorados se tiende a inhalar con mayor profundidad. Las técnicas de respiración y meditación actúan sobre las capas sutiles (la mente, la memoria) y son la clave para eliminar los miedos”. Al igual que un masaje capilar sobre el exterior del cuero cabelludo estimula el crecimiento del pelo, la respiración y la meditación pueden acceder al vasto espacio de la memoria y la mente. Y no solamente se elimina el pánico que se sufre en el momento, sino además permiten borrar la impresión que provoca la reacción cuando se presenta la situación que dispara el miedo.
Por Beatriz V. Goyoaga, Instructora y Coordinadora de El Arte de Vivir
