Beneficios del té blanco para la piel: cuándo tomarlo y cómo

La Universidad de Harvard destaca las razones para incluir el té blanco en nuestra rutina diaria.

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Conocido como el néctar de la juventud eterna, el té blanco ha ganado popularidad a lo largo de los siglos por sus propiedades naturales. La Universidad de Harvard ha señalado los beneficios del te blanco y la forma correcta de consumir esta infusión.

Aunque poco conocida, el té blanco es muy eficaz para reducir el riesgo de diabetes y enfermedades cardiovasculares, según el Harvard Men's Health Watch. Además, su consumo puede promover la relajación mental debido a su riqueza en antioxidantes y propiedades antiinflamatorias.

Cuándo tomar té blanco

El té blanco proviene de la planta Camelia sinensis y sus hojas se recolectan antes de abrirse completamente, cubiertas por finos pelos blancos. A diferencia del té verde o rojo, se recomienda tomar té blanco diariamente, especialmente durante el desayuno, cuando el cuerpo es más receptivo a sus beneficios.

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A pesar de que esta bebida es segura para la mayoría, siempre es aconsejable consultar a un médico o nutricionista antes de hacer cambios en la dieta.

Propiedades del té blanco

Según el sitio Mejor con Salud, estas son algunas propiedades del té blanco:

  • Aporta antioxidantes: Contiene más antioxidantes que el té verde o negro, destacando las catequinas, que protegen contra enfermedades como cáncer, patologías cardiovasculares, diabetes y problemas neurodegenerativos, según los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU. (NIH).
  • Ayuda a bajar de peso: Un estudio de SciELO sugiere que el té blanco puede ayudar en la pérdida de peso al inhibir la formación de nuevas células de grasa, movilizar la grasa existente y estimular la lipólisis, acelerando el metabolismo.
  • Combate el estrés y la ansiedad: La L-teanina, un aminoácido presente en el té, mejora los síntomas del estrés y la ansiedad, y potencia los efectos de la cafeína en la concentración y la memoria.
  • Protege el hígado: Los antioxidantes, vitaminas y minerales del té blanco estimulan la función hepática, ayudando en la desintoxicación y prevención de enfermedades hepáticas.
  • Cuida la piel y el cabello: Los altos niveles de antioxidantes pueden mejorar la apariencia de la piel y el cabello. La catequina EGCG es eficaz para prevenir la caída del cabello y tratar la dermatitis seborreica.
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Cómo se prepara

Para preparar té blanco, sigue estos pasos:

  1. Hierve una taza de agua y déjala reposar dos minutos después de alcanzar el punto de ebullición.
  2. Añade una cucharada sopera rasa de hojas sueltas de té blanco en una tetera.
  3. Vierte el agua caliente sobre las hojas, tapa y deja reposar de cinco a ocho minutos.
  4. Cuela y disfruta. Puedes añadir un poco de jugo de limón.

Esta bebida se puede consumir caliente o fría, especialmente para quienes prefieren bebidas a menor temperatura.

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