La prevalencia del cáncer aumenta en el mundo de la mano de una mayor longevidad y un aumento de los malos hábitos, entre los que contamos la obesidad, el sedentarismo, el consumo de alcohol y tabaco. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, se ha pasado de 14 millones de nuevos casos diagnosticados en 2012 a 18 millones en 2018. Pero, dentro de este marco poco alentador, es clave subrayar dos buenas noticias: cada vez hay más tumores curables y, a la vez, cerca de la mitad de los cánceres pueden evitarse bajando los factores de riesgo.
El tipo de cáncer más común es el de próstata, seguido de el de pulmón, colon, vejiga, piel, recto y riñón. Como en la mayoría de los países, el que más víctimas deja es el de pulmón, vinculado al consumo de tabaco.
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No todos los tumores se pueden prevenir, aunque con buenos hábitos se puede reducir un tercio de la mortalidad actual.
10 maneras de bajar el riesgo de cáncer o reducir su mortalidad
A la luz del conocimiento actual, ésta es la receta de los expertos para reducir un tercio de la mortalidad, según la Sociedad Española de Oncología Médica:
1. Atender los síntomas: La aparición de un bulto, un dolor persistente, una úlcera que no cicatriza, una mancha o lunar que cambia de forma o color, sangrados anormales, tos o ronquera persistente, cambios en los hábitos urinarios o intestinales (diarrea o estreñimiento), pérdida de peso no justificado, cansancio prolongado y falta de apetito.
2. Huir del humo del tabaco: Aunque suene cansino recordarlo, el tabaco es el responsable de hasta un 33 por ciento de los tumores. No solo está vinculado con el cáncer de pulmón, también de boca, esófago, páncreas, colon... La ley del tabaco ha conseguido reducir el número de fumadores pero se ha quedado corta. España es uno de los países europeos donde más se fuma. «Lo más efectivo para reducir el consumo, aunque suene drástico, es subir el precio (vía impuestos) y acotar los espacios donde se pueda fumar», apuntó el oncólogo Luis Paz-Ares.
3. Respirar aire puro: Los médicos saben que el humo del tabaco no es el único enemigo. El diésel de los motores o el humo de algunas cocinas también están detrás de tumores de pulmón.
4. Reducir al máximo o evitar el alcohol: Las bebidas alcohólicas están detrás del 12 por ciento de los tumores. Moderando el consumo se baja el riesgo, aunque persiste el peligro. Pese a estas viejas advertencias, nueve de cada diez personas desconocen aún que beber o fumar aumenta las posibilidades de enfermar de cáncer.
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5. Hacer ejercicio: Esta es una recomendación tanto para enfermos de cáncer como para personas que quieran estar sanas. "Antes decíamos a los pacientes que estuvieran "tranquilos", ahora sabemos que el deporte es uno de nuestros grandes aliados", dice los médicos.
6. Evitar las grasas, el exceso de sal y azúcar: La mejor dieta anticáncer es la más saludable, basada en frutas, verduras, poca carne roja y, sobre todo, menos carnes procesadas. La calidad también importa. No es lo mismo comer un buen jamón que un producto muy procesado como son las salchichas. Las recomendaciones de la SEOM también se extienden a una reducción de la sal y del azúcar y una vigilancia del sobrepeso. La acumulación de grasa y la obesidad están detrás deuno de cada 20 tumores.
7. Evitar las radiaciones (fuera de casa y en el hogar): En su campaña, los oncólogos españoles no solo aconsejan protegerse de las radiaciones solares con fotoprotector, también dentro del hogar. Se refieren a los hogares expuestos al radón y al asbesto, no frente al Wi-Fi o los teléfonos móviles, aclararon.
8. Vacúnate: Algunos tipos de cáncer están relacionados con virus y las vacunas se convierten en una auténtica arama de prevención, como la del papilomavirus para esquivar tumores de cuello de útero o la de la hepatitis.
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9. La revolución de la detección precoz: A partir de los 40-50 años, las mujeres deberían someterse a una mamografía; a los 50, toda la población tendría que hacerse una prueba de detección del cáncer colorrectal. También se aconseja el cribado de cáncer de cérvix a la población femenina. No hay consenso para otros chequeos preventivos. La SEOM dice que aún no hay evidencias para aconsejar masivamente el análisis de PSA para detectar posibles tumores de próstata, ni tampoco escáneres para fumadores en busca de tumores de pulmón. En breve, se espera que la detección precoz sufra una revolución. Bastará un análisis de sangre. No es ciencia ficción, recientemente la revista «Science» presentaba «Cancer seek», un test que detectaba hasta ocho de los tipos de los tumores más comunes en una fase precoz.
10. Cuidado con los fármacos de la menopausia: Aunque muchos ginecólogos aconsejan estrógenos para combatir los efectos secundarios de la menopausia (sofocos, subida del colesterol, sequedad vaginal...), a los oncólogos no les gusta por su relación con el cáncer de mama. "La asociación es muy pequeña, pero existe", señala la presidenta de la SEOM.
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