La compañía Coca-Cola financiará a la organización no gubernamental Global Energy Balance Network para promover un nuevo y polémico argumento entre los consumidores respecto a su reputación en torno a la nutrición saludable.
Según revela el diario The New York Times, Coca Cola busca la complicidad de esos científicos influyentes para que lancen un mensaje “basado en la ciencia” que gire en torno al concepto de "balance energético": esto es, hacer foco en que para mantener un peso saludable hay que hacer más ejercicio y preocuparse menos por la reducción de calorías. No importa lo que comas o bebas si luego lo quemás.
El tema es polémico pero tiene algo de verdad: muchos nutricionistas que vienen denunciando los perjuicios de las dietas basadas en calorías y las ingestas diarias restrictivas, vienen usando este concepto de "balance energético" para proponer una nueva mirada sobre el buen peso. Pero ese paradigma está asociado a la composición nutricional de los alimentos y los buenos hábitos, y no a comer cualquier cosa (como bebidas azucaradas o comida chatarra) y hacer el doble de ejercicio. Muy alejado.
El artículo revela que Coca-Cola donó más de 5 millones de dólares a esa ONG para que se difunda ese argumento. Según Steven N. Blair, vicepresidente de la ONG, los medios de comunicación difunden la idea de que los estadounidenses están comiendo demasiado y culpan a la comida rápida y a las bebidas azucaradas de los grandes niveles de obesidad en la población, al mismo tiempo que asegura que “no hay realmente, en la práctica, ninguna evidencia convincente de que esa sea la causa”.
La polémica sale a la luz justo cuando Estados Unidos viene persiguiendo la idea de gravar con impuestos a las bebidas de alto contenido de azúcar y de sacarlas de las escuelas, a fin de promover nuevos hábitos en la infancia.