Las leches vegetales son ricas y beneficiosas para nuestro organismo, ya que aportan gran concentración de vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales. Además de ser una alternativa (o no) a la leche de origen animal; consumir leches vegetales es algo recomendado para todo el mundo, sobre todo personas con intolerancia a la lactosa, problemas y afecciones crónicas de piel, algunas contienen gluten por lo que los celíacos deberán optar por las semillas y frutos libres de gluten.
Lo que generalmente desconocemos es que cuando compramos bebidas vegetales en caja, estamos pagando casi un 300% más del valor real de una leche vegetal que en muchos casos contiene aditivos, azúcares y además producimos desechos con sus envases.
Bebidas vegetales: sabor, salud, hidratación
Pero son tan sencillas de preparar y tan económicas, ya que se obtienen a partir de semillas y agua que tranquilamente podemos animarnos y comenzar a elaborarlas en casa.
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Qué necesitamos para preparar bebidas vegetales
- Una batidora, preferiblemente de vaso, o una batidora de brazo que tenga un accesorio de vaso grande. Es preferible usar de este tipo, ya que con una batidora de brazo es más complicado batir bien los ingredientes y que queden las partículas lo más pequeñas posible.
- Una tela fina, muselina, trapito (¡muy limpio!) o bolsa para hacer leches vegetales. Con esto filtraremos nuestra leche vegetal. Hay quien usa un par de medias. Puedes usar cualquier tejido suave que permita pasar los líquidos, pero no los trocitos, que sea resistente porque habrá que estrujarlo y retorcerlo, y que esté bien limpio.
- Botes, botellas, envases para guardar las leches vegetales una vez hechas. Puedes reutilizar los tetrabricks de leches vegetales que hayas comprado anteriormente y que estén vacíos. Enjuágalos bien y tenlos a mano cuando hagas leches vegetales.
- Boles o recipientes en los que dejar cosas en remojo,
- Embudo para pasar la leche vegetal a botellas o envases, etc., esto es equipamiento básico de cocina que también usaremos.
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Pasos básicos
A grandes rasgos, este es el esquema general para saber como tratar cada semilla, cereal o fruto seco.
- Se utilizan en su estado natural: Los frutos secos blandos (anacardo, nuez, pistacho, nuez de macadamia…) y los cereales en copo.
- Se remojan entre 2 y 12 horas antes de elaborar la bebida: Los frutos secos duros (almendra y avellana), la chufa, los granos de cereal integral crudo, las semillas de piel dura (sésamo, quinoa, chía).
- Se pueden cocer entre 10 y 30 minutos antes de elaborar la bebida: la soja y los cereales integrales. Esto lo hacemos porque o bien son tóxicos en crudo, o demasiado duros (crudos) para nuestro estómago.
- El endulzado es opcional, pudiendo utilizarse miel de abejas, azúcar moreno, panela, azúcar mascabo o yerba dulce (stevia rebaudiana). Lo ideal es acostumbrarse a los sabores genuinos. Estas leches veggies pueden complementarse con jugo de frutas o verduras (manzanas, uvas, duraznos, zanahorias, apio, etc
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Recetas para empezar a probar
Leche de Avena
Es una bebida maravillosa, rica en nutrientes esenciales, y que aporta a su vez una amplia diversidad de beneficios y propiedades, ideal dentro de una dieta sana, variada y equilibrada. Es una bebida que aporta energía, destacando sobre todo su alto contenido en carbohidratos. De hecho, 100 gramos de esta bebida aportan casi 10 gramos de hidratos de carbono.
Ingredientes
- Media taza de avena arrollada
- 1 litro de agua
Procedimiento
- Mezclar la avena con el agua y llevar al fuego hasta que hierva, bajar el fuego al mínimo y cocinar 3’. Al apagar el fuego mezclar bien y dejar reposar 10’. Licuar la preparación y filtrar, exprimiendo bien el filtro.
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Leche de Arroz
Ingredientes
- 1 taza de arroz integral
- 10 tazas de agua
- Cuarta cucharadita de sal marina fina
Procedimiento
- Lavar y tostar el arroz a fuego mínimo sin utilizar vehículo graso, hasta que se dore. Revolver con cuchara de madera. Agregar el agua y cocinar durante unas 2 horas tapado y a fuego lento. Luego filtrar y endulzar.
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